UN PACTO ELECTRICO PARA SALVAR EL PAIS

Por Balbueno Medina

Lic. Balbueno Medina

El  gobierno  ha comenzado a dar los pasos pertinentes para avanzar en áreas fundamentales para el desarrollo nacional como son la educación y el servicio energético, pero para materializar su propósito necesitará de la voluntad y la integración colectiva de la sociedad.

Los meses por venir se encargaran de poner a pruebas los anuncios rimbombantes de las autoridades y las promesas milagrosas de los sectores empresariales, que han mostrado la disposición y firme de decisión de contribuir con el impulso de las iniciativas tendentes a enfrentar el analfabetismo y la problemática energética que nos han sumido en el subdesarrollo.

Gracias al cumplimiento de la promesa del presidente Danilo Medina, ya hemos visto que inicialmente se notará  el despegue en el sistema educativo nacional, pero ahora el reto está planteado en el área energética donde se ha anunciado la firma de un pacto que nos pondrá en la misma ruta.

Desde luego, en lo que respecta al sistema energético nacional, al Poder Ejecutivo no le será tan fácil tomar las medidas que adoptó en área educativa, ya que los intereses que se mueven en ese entorno son mucho más complejos, y por esa razón fue que tuvo que dejar para última instancia el abordaje del tema.

De producirse ese pacto energético en el breve tiempo en que ha anunciado el gobierno al país, estaríamos ante uno de los grandes logros que en su corta gestión ha alcanzado el Danilo Medina y también demostrará el alto sentido patriótico y humanitario que tendrán los dueños de las generadoras privadas que le suplen sus servicios al Estado dominicano.

La sociedad dominicana espera que esta vez el Estado no salga tan perjudicado, con el pacto que se firmara, como con los acuerdos que se suscribieron en el pasado, donde todos los habitantes de este territorio hemos tenido que pagar el servicio más caro y deficiente que nación alguna pueda proveer a sus ciudadanos.

Por suerte que la realidad que vivimos los dominicanos y que a diario pregonamos, por la precariedad del servicio energético que recibimos, ya ha trascendido a otras naciones del mundo, donde incluso nos han colocado en el último lugar de los países que cuentan con un sistema eléctrico de calidad.

Esa recientemente evaluación que se ha hecho debe ser motivo de preocupación, no solamente para el gobierno que ha mostrado interés en renegociar los contratos eléctricos existentes, sino para los proveedores del servicio energético al Estado dominicano, porque finalmente a ellos es a quienes están acusando directamente de suplir un producto de mala calidad y encima de eso bastante caro.

La firma del pacto energético debe producirse lo antes posible porque beneficiara a todos por igual y a los generadores particularmente les dará la oportunidad mejorar y adecuar  sus unidades de producción para establecer tarifas a precios razonables y sustentables para la población.

Las inversiones son buenas y necesarias para el crecimiento y sostenimiento de las economías de los pueblos, pero en las economías modernas y prosperas los inversionistas no llegan a obtener tantos beneficios como los que generan los propietarios de las empresas energéticas de la Republica Dominicana, por esa razón sería bueno que pongamos fin a esa irracionalidad con la firma del pacto que nos beneficiara a todos.

agendasemanal@hotmail.com