Un clamor por la región Fronteriza
MI SENTIR
Por Balbueno Medina
La despoblación, la reducción de las expectativas de vida y
la desesperanza por un futuro mejor, son las condiciones actuales que
caracterizan la mayoría de las
provincias de la región Fronteriza de la República Dominicana.
Ese panorama desolador ha sido lo que ha movido al Ministerio
de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPYD), a concentrar gran parte de sus esfuerzos
en mejorar las condiciones de vida de los habitantes y las siete provincias que
conforman la franja fronteriza que nos separa de Haití.
El MEPYD, busca disminuir los altos índices de embarazos en
adolescentes, la desnutrición y las precarias condiciones de infraestructuras
en que se encuentran la mayoría de las comunidades fronterizas de nuestro país,
mediante la implementación de programas sociales y la mejoría de viviendas a
familias que viven en condiciones de vulnerabilidad.
Estas acciones, que han sido puestas en marchas en las
localidades fronterizas más empobrecidas, han sido coordinadas a través del Instituto
de Desarrollo para el Sur (INDESUR), la Dirección General de Desarrollo
Fronterizo (DGDF) y Organizaciones No Gubernamentales, que trabajan en favor de
los sectores menos pudientes de las comunidades de la zona.
Sin embargo, esas iniciativas del MEPYD, solo podrían ser un
paliativo a las múltiples necesidades por las que atraviesan las Comunidades Fronterizas,
por lo que consideramos que el gobierno debe hacer un esfuerzo mayor para
impulsar los proyectos de desarrollo turísticos en la costa de Pedernales y la instalación
de industrias en las diferentes provincias de la región.
La Ley 12-21, que derogó la antigua Ley 28-01, de Desarrollo
Fronterizo, debería ser aprovechada por
el gobierno para promover a nivel nacional e internacional las inversiones a
gran escala en las siete provincias de la región Fronteriza del país, porque
eso servirá para enfrentar definitivamente el estado de miseria y abandono en
que han permanecido los habitantes de esa zona.
No es que los programas sociales que se ejecuten de vez en
cuanto en la región Fronteriza por parte de instituciones del Estado sean
malos, ya que resuelven de manera coyuntural problemas ancestrales que padecen
esas comunidades, pero lo que sí podría llevar soluciones definitivas a las
necesidades de las personas de la región es la instalación de empresas que
garanticen la creación de fuentes de empleos bien remunerados que mejoren las
condiciones de vida de los trabajadores para que permanezcan en el lugar.
Para nadie es un secreto el que muchas localidades de la región
Fronteriza se encuentran casi despobladas por la falta de oportunidades
laborales, razón por la cual jóvenes y trabajadores calificados han tenido que
emigrar a los centros urbanos, en busca de mejores oportunidades porque no
encuentran nada que hacer y los que por la carencia de pericias se quedan en
sus localidades, la única vía de sustento que encuentran es la de motoconcho, a
través de la cual pueden mal subsistir.
El director General de la Dirección de Desarrollo Fronterizo,
Ramón Pérez Tejada, quien estuvo en la entrevista de nuestro programa de Tv,
Agenda Semanal, que transmitimos todos los sábados a las 2 de la tarde por RNN
Canal 27, nos dijo que para el gobierno ha llegado la hora de la Frontera y que
a través de Pro-Dominicana se ha iniciado una campaña internacional de promoción
de la región Fronteriza de la República Dominicana para atraer inversiones de empresas
extranjeras en la zona, la que consideramos bien atinada, aunque creemos que
esa promoción debe hacerse extensiva a todo el país para que resulte lo más
abarcadora posible.
Por lo pronto, de acuerdo a lo expresado por el funcionario,
hay un promedio de 200 empresas que han mostrado interés en invertir en la región
Fronteriza, especialmente en la parte Sur del país, y eso resulta alentador y
esperanzador para las provincias que se beneficiaran con el establecimiento de
ellas, por lo que desde ya se deben ir creando las condiciones que permitan a
las mismas instalarse sin trabas como ha ocurrido en el pasado.
Publicar un comentarioDefault CommentsFacebook Comments